mesa responsabilidad social de alicante

¿Cómo puede tu empresa ser + social?

La RSC es un término muy manido últimamente porque muchas empresas quieren diferenciarse de su competencia usando la RSC. Sin embargo la RSC no es un objeto de usar y tirar o de usar cuando me convenga. Más bien, y siendo coherentes, debe ser una manera de gestionar la empresa teniendo muy en cuenta a mis grupos de interés, los famosos “stakeholders”. Podemos enumerar los principales, aunque por la casuística de cada empresa, los grupos de interés pueden ser muy distintos y variados.

Los principales grupos de interés para la empresa son:

  • Grupos de Interés Internos: los trabajadores (incluyendo el área directiva y gerencial, que también son trabajadores de la empresa), los accionistas/propietarios de la empresa,
  • Grupos de Interés Externos: nuestros clientes y proveedores, el entorno medio ambiental donde nos movemos y respetamos, los competidores de mi entorno geográfico donde desarrollo mi actividad, las administraciones Públicas , y las entidades sociales y los movimientos ciudadanos de mi ámbito de actuación

Estos 8 grupos son los principales grupos de interés que las empresas deben considerar en su estrategia, tenerlos en cuenta y tener un diálogo fluido con ellos, aplicarles unas políticas de actuación personalizas y comunicándoles todos los aspectos que puedan afectar al binomio empresa-grupo de interés, ya que esa transparencia y buena comunicación redundará en un mejor conocimiento de todas las partes y, sobre todo, generará intereses comunes y podrán identificarse mutuamente en unos valores compartidos que sellarán por siempre una buena relación mutua.

En resumen, la RSC es una manera de gestionar una empresa, donde las personas pasen a ser el centro de las relaciones socioeconómicas y, con la legitimidad de seguir ganando dinero, los criterios de rentabilidad son igualmente necesarios para la supervivencia de la empresa.

¿Cómo empiezo a ser + social?

Muchas empresas empiezan implementando progresivamente la RSC en distintas áreas de su organización. Pueden hacerlo por el área de recursos humanos, el área de proveedores y suministradores para que tanto producto como suministrador compartan valores y formas de ver la empresa apoyándose en certificaciones de sistemas de gestión de sus recursos (políticas ambientales, calidad, seguridad y salud en el trabajo, etc.). Sin embargo, cada vez son más las empresas que han empezado ya a apostar por la innovación social en sus proyectos de responsabilidad social, cosa que refuerza su reputación corporativa mediante el apoyo de proyectos que generan  impacto social positivo. El pasado mes de diciembre se constituyó la mesa RSC de Alicante y Nova Feina estuvo presente en esa mesa.

Pinchando en este enlace podéis ver siete ejemplos de innovación social entre empresas. Parece que ya se va tomando conciencia que la innovación social es un buen camino para fidelizar a clientes y aumentar la reputación corporativa de la empresa.

¿Qué ventajas me aporta la Responsabilidad Social?

Una pregunta importante que se hacen muchos empresarios a la hora de adoptar una política de RSC en su empresa a nivel estratégico, es decir, que afecte a todos y cada uno de los niveles de la organización, es la siguiente: ¿Qué ventajas me depara ir por el camino de la responsabilidad social? Pues básicamente dos muy importantes: mis empleados estarán más orgullosos de mí como empresa y, además, mis clientes y el mercado me verán con otros ojos mucho más positivos.

Para que esto sea así es necesario que como empresa tengamos muy en cuenta estos factores:

  • El apoyo gerencial y de la alta dirección es fundamental.
  • Necesito detectar qué está dentro de mi empresa que pueda favorecer a la responsabilidad social, lo que se llama el análisis de materialidad, es decir, identificar todas y cada una de las actividades que puedan ser RSC y que ya realiza la empresa sin saberlo.
  • Reconocer que a mi alrededor existen unos grupos de interés con los que debo reforzar mi vinculación y poner el foco en valores compartidos. Este aspecto es fundamental. Ya no voy solo, voy de la mano de muchos grupos que me interesa cuidar porque me influyen en mi estrategia y yo les influyo a ellos en la manera que tengo de hacer las cosas.
  • Involucrar a todas y cada una de las áreas de mi organización en mi apuesta por la responsabilidad social de la empresa.
  • Establecer unos objetivos alcanzables y unas metas creíbles.
  • Medir y evaluar el desempeño de mis trabajadores en función de los objetivos y metas de RSC fijados.
  • Comunicar la RSC, qué importante es contar lo que hago y cómo lo hago. Si no comunico, no se conoce y no nos ponemos en valor. La ecuación no cuadra sin valor…
  • Colaborar con mi competencia. Es más práctico y rentable colaborar dentro de lo posible, que competir ferozmente y enfrentarse al vecino.

Y muchas razones más. Los gerentes de las empresas tienen muy buenos motivos para gestionar sus empresas con criterios de responsabilidad social. Desde un mayor compromiso con sus trabajadores, el ahorro de costes de producción aplicando criterios de eficiencia, incrementando la diferenciación de la marca, hasta una mayor fidelización con sus clientes generando valores compartidos.

Lo podéis ver con más detalle aquí y este otro blog. Es todo un reto: ser una empresa más social, más comprometida con las personas, con el medio ambiente, y en definitiva, con la sociedad.

Un mundo más justo, es posible y deseable. En la Responsabilidad Social de la Empresa tenemos una magnífica herramienta para conseguir un mundo así. Seamos valientes. Entremos en el mundo de las empresas + sociales. Todos ganamos.

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